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El armario es una pieza muy importante del mobiliario de nuestra casa. Guardaremos en él nuestra ropa, complementos, objetos varios, etc., y además nos ayudará para tenerlo todo colocado y ordenado. Una buena calidad en sus materiales y en sus sistemas, evitarán problemas posteriores y quebraderos de cabeza.

Armario empotrado. Generalmente están fabricados de obra. La ventaja que tiene este tipo es que ocupan menos espacio, pues la puerta del armario queda al mismo nivel que la pared y la zona interior está dentro de la estructura de la pared. En este caso, las medidas estas delimitadas y tendremos que ajustarnos al hueco disponible.

Armario modular. No necesitan de obra para instalarlos. Se pueden colocar casi en cualquier estancia de la vivienda. Se instalan en modo lineal, en esquina o en forma de L, y en zonas que tengan vigas, tuberías, etc., Se aprovecha más el espacio disponible, pues se pueden fabricar hasta el techo. Además, dependiendo de la habitación, podremos elegir las medidas de ancho y de fondo que más nos interese.

Si nuestra vivienda ya tiene los armarios empotrados de obra y quiere cambiar las puertas, debe medir el hueco disponible y ajustarse a las medidas que disponga.

Si quiere instalar un armario modular, es clave estudiar el espacio que tenga en la habitación y si va a ser para uso individual o compartido. Cuando la habitación sea amplia, es aconsejable instalar varias puertas y módulos interiores para aprovechar al máximo el espacio. Con esta opción tendremos la posibilidad de elegir nosotros las medidas que queramos.

A la hora de escoger el diseño, miraremos la estancia donde va a ir colocado y optaremos por el que mejor se adapte a la decoración o a nuestras preferencias personales.

Al escoger las puertas de nuestro armario es muy importante elegir el sistema de apertura adecuado. Hay que tener en cuenta su ubicación, el espacio que disponemos y la facilidad de uso. Si lo vamos a instalar en una habitación espaciosa no tendremos problemas en la elección del sistema, pero si el espacio está más limitado, debemos estudiar cual es la mejor opción. Los sistemas más utilizados actualmente son: abatibles y correderas o deslizantes.

Puertas abatibles. Se deben colocar en estancias donde al abrirlas, haya suficiente espacio por delante, para que no golpeen con ningún accesorio o mueble cercano, como por ejemplo la cama. La apertura se produce hacia afuera mediante bisagras. Generalmente se utilizan como armarios empotrados y se instalan en zonas de difícil acceso o con medidas reducidas.

Puertas correderas o deslizantes. Esta opción es la mejor si no dispone del suficiente espacio delante para abrir el armario. La apertura es lineal de izquierda a derechas o, al contrario, y se produce gracias a que las puertas se deslizan por guías instaladas en la parte superior e inferior del módulo. Es un sistema muy cómodo de utilizar. Se suelen instalar como armarios modulares y tiene la ventaja de que, puede aprovechar al máximo el espacio disponible.

Una vez que tenemos claro el sistema que más se adecua a nuestras necesidades, viene la elección del modelo de nuestras puertas. Existen en el mercado una amplia oferta en acabados, texturas y materiales que se utilizan para su fabricación. Es primordial que la calidad de estos sea óptima.

El efecto que produce un armario con respecto al espacio donde va a ir ubicado, tiene mucho que ver con el diseño que tengan las puertas. A continuación, le indicamos algunos consejos para ayudarle en su elección.

Si le gusta un estilo moderno y desenfadado, puede optar por armarios que combinen acabados distintos, como cristal, melamina, madera, lacados, etc.

Si la decoración de la habitación es más clásica, con puertas y muebles de madera, puede elegir acabados con tonos parecidos, para no romper la estética.

Cuando el mobiliario que tengamos sea de líneas sencillas y tonos neutros, podemos optar por modelos con colores llamativos que destaquen sobre las paredes y el resto de la habitación.

En habitaciones infantiles, podemos elegir combinaciones con colores luminosos o llamativos y conseguir una estancia alegre y acogedora.

Actualmente las puertas en acabado lacado blanco son de las más demandadas en el mercado. Aportan sensación de amplitud, limpieza y calidez en las habitaciones donde se instalan. Tienen la ventaja de que se pueden solicitar en modelos lisos, decorados, combinados o con diseños personalizados.